En este momento estás viendo Rosalía Arteaga dice que no hay razones para el juicio político contra Lasso

Rosalía Arteaga dice que no hay razones para el juicio político contra Lasso

La primera vicepresidenta y presidenta y de la República del Ecuador en 1997, Rosalía Arteaga que reemplazó a Abdala Bucaram, que fue destituido por ‘incapacidad mental’, dice ya no estar inmersa en el ámbito de la política, pero si esta pendiente del contexto y la crisis que vive el Ecuador.

Ante el pedido de algunos asambleístas, que piden la destitución del presidente Guillermo Lasso, por los acontecimientos que mantienen en crisis al país, considera que la destitución no se debe dar por que la inestabilidad política también genera inestabilidad económica, falta de inversión y a eso se suman temas como la inseguridad ciudadana y las inclemencias del clima que han sufrido algunas partes del país. Son varios factores que contribuyen a que el país salga perdiendo.

Considera que la decisión de hacer el juicio político al presidente tiene que ver con la política partidista de algunos sectores que no miran más allá de lo que puede ocurrir y sus consecuencias. Reflexiona que no hay razones para que se de ese juicio político y espera que la situación del país mejore, luego de desestimarse este juicio.

Por otra parte, la muerte cruzada tampoco sería una salida adecuada porque esto implica que, durante seis meses, el Ecuador entre en un proceso de elecciones, que no es pertinente para la situación del Ecuador en estos momentos.

“Lo que sí tenemos que pedirle al presidente es que mejore su política social en educación, salud, generación de empleo, pero también en el tema de seguridad que es muy importante y que exista una sensibilización en estos aspectos”, expuso Arteaga, rescatando el derecho de los ecuatorianos a reclamar, pero haciéndolo de la forma pacífica, poniendo de énfasis la educación ciudadana.

Destaca que los ecuatorianos deben ‘arrimar el hombro’, con los diferentes estamentos del estado que han generado un gran desprestigio, ejemplo de ello es la justicia; con jueces que otorgan fallos que van en contra de las decisiones; dejando en libertad a los culpables. Asimismo, la baja aceptación que tiene la función legislativa, que sus funciones son las de actualizar, crear y legislar leyes.

Muestra su preocupación ante la dotación de logística y armamento a la Policía Nacional y estima que se esta perdiendo territorio en contra de la corrupción y narcotráfico.

Ante la desconfianza de la ciudadanía en los actores políticos, indica que es necesario trabajar en el fortalecimiento de los partidos y movimientos porque ha habido una degradación de la política en general. Por otra parte, la exvicepresidenta y expresidenta del Ecuador dice que tiene que ver mucho la educación ciudadana y ser responsables con el voto y saber a quien se elige.

La solución para mejorar esta crisis, según Arteaga es acudir a la educación, estableciendo las reglas claras del juego, que no exista impunidad para los delincuentes y la desatención en servicios básicos en las zonas de frontera, como puntos clave que ayuden a combatir la injusticia y desigualdad.

Conoce que urante el transcurso de estos meses, no se ha ejecutado el presupuesto ni el 5 %, en algunas carteras de estado a lo cual, caracteriza de ‘vergonzoso’ porque a la final regresan al presupuesto general del estado y de esa forma, no se cumplen con las expectativas y no se trabaja en temas importantes que faculten el desarrollo del país.

“Al presidente le queda gobernar en estos años de trabajo que aún tiene de estar al frente del gobierno con políticas reales…”, relato Arteaga y confía en las nuevas designaciones de los generales Paco Moncayo y Wagner Bravo, que están al frente en temas de seguridad para controlar los altos índices de violencia en el país.

Deja claro que el ámbito histórico, esta situación se ha venido dando desde el momento en que se decretó que en el Ecuador había ciudadanía universal y que no se necesitaba visa para arribar al país. Finalmente, llamó a la tranquilidad al sector político, sin dejar de trabajar por un mejor porvenir.

 

 

 

 

 

Deja una respuesta