Smilcar Rodríguez, exalcalde del cantón Zamora analiza la administración del actual personero municipal. Enfatiza que en su administración se realizaron obras y proyectos a los cuales no se les ha hecho un debido seguimiento y mantenimiento, debido a ello se han ido perdiendo obras de atracción turística.
Es fundamental que la autoridad rinda cuentas y que el pueblo exija esa rendición de cuentas. Es importante llevar adelante esa evaluación desde la parte colectiva de la ciudadanía y desde la parte comunicacional que hacen los medios de comunicación, importante no solo para las alcaldías, sino para las prefecturas, concejalías y GADs parroquiales.
“Estamos a un paso de cumplir cuatro años de administración y realmente ver hacia donde se ha avanzado porque la ciudadanía necesita saber que ha ganado o ha perdido con la actual administración y a través de ello, felicitar lo bueno y dar críticas constructivas en este caminar”. Dentro de la alcaldía ha habido un deterioro enorme en el tema del desarrollo que hemos venido impulsando desde muchos años atrás, indica Rodríguez que, durante su periodo de administración, Zamora estuvo posicionado en un cantón de desarrollo con obras y un municipio organizado y planificado que coordinaba con autoridades gubernamentales.
Según Rodríguez el trabajo que la actual administración viene desempeñando no refleja el gran desarrollo que los zamoranos aspiran; con grandes obras, con impulso al desarrollo, al turismo, de la mano con el tema minero, agropecuaria, productivo, con el beneficio de la obra pública para la comunidad.
El cabildo tiene la obligación de llevar adelante con responsabilidad de orientar, sugerir, aportar, pues ninguna obra se efectúa sin la aprobación de un cabildo. Si el alcalde está fallando, el cabildo debía poner en orden el municipio, mediante la fiscalización, pero no se ha dado, lo estipula el exalcalde.
Califica a las dos últimas administraciones como “nefastas”, porque no han impulsado el desarrollo y que se han limitado a sus beneficios personales, para ello considera necesario que el cabildo debe alzar la voz con la fiscalización de cada administración. Aún hay tiempo para que cada quien cumpla su rol de acuerdo a sus funciones. Las obras van creciendo y se va viendo su mejoramiento y obviamente su alcalde es quien se lleva la admiración o desaprobación por su gestión.
El exalcalde enfatiza que durante su administración creó proyectos emblemáticos que auguraban un éxito para atraer el turismo, pero que no han tenido un mantenimiento adecuado. Los próximos candidatos deben ser gente honesta, profesionales que conozcan de la materia, que se involucren y que demuestren su capacidad de administrar. Se debe presentar un número menor de candidatos para que la votación no se divida. Lo fundamental es que los ciudadanos se unan para definir pocos candidatos, porque hay recursos que se pierden por candidatos que no tienen un apoyo favorable. Debe primar la ética y el profesionalismo y que hay que ser coherentes en que se planifique el modo de llegar a un puesto de alto rango, se lo debe hace mediante méritos.
