En el marco del cambio de gobierno que se llevará a cabo el 23 de noviembre, el presidente de la República saliente, Guillermo Lasso, transmitió un mensaje contundente durante uno de sus últimos actos como jefe de Estado. En el lanzamiento de su libro «900 días: democracia y resultados», Lasso abogó por la necesidad de alejarse de pactos con políticos para sostenerse en el poder y, en su lugar, comprometerse con el pueblo y los valores fundamentales de una sociedad que busca avanzar.
El evento tuvo lugar en el salón de banquetes del Palacio de Carondelet, donde más de cien personas, incluyendo colaboradores cercanos, ministros de Estado y delegados en empresas públicas, se reunieron para acompañar al presidente saliente en este significativo momento.
Durante el panel moderado por el periodista español Gustau Alegret, Lasso repasó las políticas públicas implementadas durante su mandato de dos años y seis meses. «No me importa que el nuevo gobierno coseche nuestra siembra. No se trata de nosotros, se trata del bienestar del pueblo ecuatoriano», afirmó el mandatario.
El presidente Lasso destacó áreas clave de su gestión, como la lucha contra la desnutrición infantil, la exitosa campaña de vacunación contra el COVID-19, el mejoramiento de la economía y la firma de acuerdos significativos.
En referencia a su decisión de disolver la Asamblea Nacional en mayo de 2023, Lasso señaló que fue una medida para preservar los pilares de la democracia y evitar pactos que podrían conducir a la impunidad. «No pacté con nadie, porque ceder significaba abrir la puerta a la impunidad para que los delincuentes puedan volver como víctimas y no como lo que realmente son», afirmó el presidente saliente.
Asimismo, Lasso reconoció errores en su administración y expresó sus condolencias por el asesinato del excandidato presidencial Fernando Villavicencio,
