La cabecera parroquial de Guadalupe y barrios aledaños durante mucho tiempo han venido atravesando el problema de escases del agua que tiene una regional en nueve comunidades. En la actualidad se distribuye el líquido vital a través de mangueras; sin un tanque de captación que les permita abastecerse por todo el tiempo y que cuando llueva no escasee.
En pleno siglo XXI y con la necesidad de obtener el líquido vital para una población de más de 190 familias, después que el sistema de captación anterior por la fuerza de la corriente del agua, haya sido destruido, la población recibe este líquido a través de mangueras, quienes son sostenidas con piedras y atadas a los arbustos para evitar que el pico se mueva y siga receptando el agua de una vertiente, que es una de las más limpias de esta parroquia. Sin duda, corre el riesgo que por su orificio ingrese material pétreo como piedras o arena, siendo propensa a taponarse.
Enérgicamente reclaman que cancelan todos los meses por el servicio de agua y si no lo hacen son objeto de multa o les cortan el servicio. Pero no reciben ese servicio de calidad. Dicen que se organizarán como comitiva y acudirán hasta el municipio para nuevamente solicitar se les dé una solución inmediata.
“Nos encontramos en una situación crítica por la situación del agua. Se ha ido la captación y no tenemos quien nos solucione los problemas”, expuso un morador, quienes recalcan que vienen sufriendo de estos problemas desde hace varios años y que desde que se destruyó el tanque de captación, las autoridades encargadas de este asunto han hecho caso omiso.
Una madre de familia asegura que ha tenido que hacer faltar a su hija a la escuela, precisamente por la falta de agua. Aseguran que han hecho comisiones hasta la Alcaldía y la gerencia de la Empresa Pública de Agua Potable y Alcantarillado del Cantón Zamora (EMAPAZ-EP), donde les han hecho conocer las necesidades que tienen como parroquia, pero no les han resuelto sus problemas, así lo expuso la moradora Elida Poma.
Además, dan constancia del riesgo que corre la persona encargada del cuidado del agua. El empleado municipal debe caminar todos los días hasta ese sector, muchas de las veces con lluvia, atravesando un camino pedregoso y con el peligro de resbalar y caer al afluente. Los ciudadanos consideran que el servidor municipal cumple un trabajo sacrificado y es lo que muchas de las veces desconocen.
“Estoy seguro que en un mes, 15 días reciben agua y 15 días no. Por eso es el clamor de los barrios y comunidades”, expuso Patricio Montero, presidente del GAD parroquial de Guadalupe.
Montero manifiesta que, como GAD parroquial han solicitado la delegación de competencia, pero para realizar un estudio de un nuevo sistema y están esperando la respuesta del Ministerio del Ambiente, Agua y Transición Ecológica para que les otorgue el informe de viabilidad técnica y de esa forma presentarlo ante las instituciones del Estado y gestionar los recursos.
El proyecto según cálculos del año anterior, tendría un costo de más de un millón de dólares, pero es un proyecto con una planificación al futuro de unos veinte años. 487 alumnos en la Unidad Educativa Daniel Martínez Ordóñez y otras instituciones que funcionan dentro de la cabecera parroquial. Asimismo, el centro gerontológico para los adultos mayores y personas con discapacidad, vulnerables que no pueden estar sin este liquido vital. Es un derecho que esta establecido en la Constitución del 2008.
