Vicente Palta es un habitante zamorano, oriundo de la parroquia El Tambo, cantón Catamayo, provincia de Loja, de 78 años de edad; él migró a esta ciudad en el año 1976, cuando la sequía azotaba en ese entonces a la provincia lojana.
Fue trabajador del extinto INCRAE, que luego paso a ser ECORAE; institución a la que actualmente se la conoce como la Secretaría Técnica de la Amazonía. Ingresó al establecimiento el 13 de noviembre de 1977 como auxiliar de servicios para después pasar a ser conductor profesional, este cargo lo cubrió hasta el 29 de agosto de 2015, fecha de su jubilación.
En el 2015, presentó la documentación con la intención de jubilarse, en la institución le habían manifestado que lo hiciera sin ningún problema, porque contaban con el dinero para cancelarle por sus 38 años de servicio. Al momento de separarse de la institución, Don Vicente sintió nostalgia al dejar a sus compañeros de trabajo con los cuales compartió durante muchos años. Cuenta para Diario El Amazónico que este trabajo le dio muchas experiencias, pues gracias a él, conoció varios cantones, en especial de la amazonía, a pesar de estar fuera, siempre llama a preguntar por sus excompañeros. Pero como tuvo experiencias gratas, también tuvo malos recuerdos, que tuvo que pasar con tal de cumplir con sus labores.
Hasta el momento Don Vicente aún no ha cobrado la liquidación total de su jubilación. “Estoy recibiendo un pago mensual por concepto de un sueldo patronal y más el pago del seguro, nada más”. De todos los años de servicio, el ciudadano menciona que no ha recibido ningún valor por concepto de su trabajo de muchos años.
Ha llevado a cabo procesos judiciales durante algunos años, pero no recibe una respuesta favorable, de igual manera, su caso lo dio a conocer a autoridades de años atrás pero tampoco le otorgan una solución. Son 7 años que ha esperado su pago, pero sin ninguna esperanza, es el pesar de Don Vicente, al igual que otras personas que dedicaron la mayor parte de su vida y sin un pago que les permita disfrutar de muchos años de trabajo.
Ha acudido en reiteradas ocasiones hasta las instalaciones de la Secretaría Técnica de la Amazonía, pero los funcionarios le han manifestado que no tienen conocimiento de su caso. Judicialmente de la mano de un abogado, tuvo 6 audiencias, 2 en Centinela del Cóndor y 4 en Yantzatza, sin obtener un fallo a su favor. El abogado de la institución de ese entonces le había manifestado que no tenía el derecho por el hecho de no ser ‘sindicalizado’ y no haber tenido un contrato colectivo, sin embargo, durante esa época, no existía un sindicato.
Por su parte, su abogada defensora, le comentó que había perdido el proceso judicial y que se quedará tranquilo por el sueldo que percibía por concepto de un sueldo patronal. Ha conversado con el personal del Ministerio de Trabajo, quienes les han manifestado que no tienen conocimiento de su caso y que cada institución gubernamental es la encargada de resolverle esta situación a la persona jubilada.
Hace el pedido a las autoridades provinciales y nacionales de que se investigue a profundidad su caso y se le pueda realizar su pago por todos los años dedicados a esta institución gubernamental, además, ese dinero es necesario para su alimentación, las medicinas de él y de su esposa. LM
