El presidente de la Comisión de Fiscalización, Fernando Villavicencio (Ind.), fue notificado este viernes 11 de noviembre sobre la resolución con la que el Consejo de Administración de la Legislatura (CAL) lo suspendió por 31 días por una queja del correísmo.
La sanción implica que en el curul de Villavicencio deberá actuar su asambleísta alterna, Rocío Yépez, quien tuvo visibilidad en abril pasado cuando denunció un intento de secuestro en Quito. En cambio, la Presidencia de la mesa deberá ser ocupada por la vicepresidenta, Ana Belén Cordero (Creo).
Sin embargo, en la sesión del Pleno de este jueves 10, Villavicencio ya anticipó que presentará una acción de protección en contra de esta medida, lo que concretó este viernes.
“Yo voy a presentar una acción de protección porque lo que se ha hecho es una atrocidad al vulnerar mis derechos y confío en que la justicia en este país me dará la razón, y que deje sin efecto esta írrita decisión”, dijo.
Es una postura que comparte la oficialista Nathalie Arias (Creo), quien se abstuvo de votar por la sanción. Adujo que el hecho de que el correísmo haya presentado tres quejas contra Villavicencio y denuncias penales, puede dar lugar a que el legislador alegue que hay una persecución en su contra.
La resolución en el CAL se adoptó con los votos de los delegados del correísmo en este organismo, el Partido Social Cristiano y el presidente de la Asamblea, Virgilio Saquicela (ind.), con base en una queja de Patricia Núñez, del correísmo.
“Lo suspendieron y lo han hecho con justicia porque no puede ser que por un tuit se trate a una asambleísta dándole epítetos, actuando de manera misógina, cuando se tiene que respetar a una mujer”, señaló Núñez.
Arias señaló que se trata de una sanción desproporcionada, aunque sostuvo que Villavicencio no debía comparar a Núñez con un personaje de la popular telenovela Betty la Fea. Fuente: El Comercio
